Nos juntamos a la salida del pueblo junto al polideportivo y salimos en dirección a Manises, en menos de un kilómetro y antes de cruzar el puente que atraviesa el río, cogemos un desvío a la derecha y pedaleamos paralelos a la autovía unos 500 metros. La vuelta será por un tramo distinto de la Ruta pero en la ida elegimos esta variante.
Al entrar en la Ruta, a unos 3 km. desde nuestro inicio, lo hacemos en el término municipal de Manises, a la izquierda nos encontramos uno de los numerosos puentes que atraviesan continuamente el río y que nos facilitan el paso de uno a otro lado del mismo, cogemos la opción de la derecha y desde aquí vamos a ir constantemente paralelos al río, bien por la margen derecha o por la izquierda.
Un poco más adelante, aproximadamente en el kilómetro 4, atravesamos una pequeña arboleda con mucha sombra donde suelen ir a probar fortuna con sus cañas, padres e hijos. Cruzamos de nuevo un puente que nos sitúa a la parte izquierda junto a un picadero de caballos y donde es frecuente encontrar a grupos de jinetes paseando con sus monturas.
Tras una breve bajada nos encontramos junto a una encrucijada y que puede hacer que te equivoques y sigas en dirección recta cuando este no es el camino, es el único punto de la ruta donde podemos confundirnos puesto que el resto está bien señalado y es fácil de seguir sin salirse de la pista.
De nuevo cruzamos un puente que nos lleva a la parte derecha y desde aquí empieza un breve ascenso con alguna que otra bajada que hace que esta primera parte de la ruta pase muy rápidamente. A lo largo de la ruta nos encontramos con señalizaciones que impiden el paso de vehículos y destinan la ruta a peatones, ciclistas y jinetes.
Es una ruta muy frecuentada, tanto por su relativa facilidad, ya que no presente excesivos desniveles, como por su proximidad a grandes núcleos de población, de hecho no es difícil encontrarse a niños pedaleando junto a sus padres (Momento que siempre aprovecho para animarlos a seguir dando pedales y recordarles a sus padres que tienen que cuidar a la juventud pues ellos son el futuro de este deporte).
Tras una breve pero intensa subida ( ¡OJO! La bajada se hace a tumba abierta y es fácil encontrarse con alguien en sentido contrario en una curva cerrada sin visibilidad) cruzamos un puente y volvemos de nuevo a llanear paralelos al río. Un poco más allá, cerca del km. 7 nos encontramos a la izquierda un observatorio de aves, en un pequeño remanso del río donde suelen descansar.
En seguida, llegamos a la zona de la Presa donde tras cruzar de nuevo un puente, nos encontramos en un área de recreo con columpios y barbacoas donde son muchas las familias que van a pasar su tiempo libre.
Una vez pasamos esta zona, cruzamos una pasarela que atraviesa una zona de remolinos del mismo río, protegida con vallas y que nos acompaña durante unos metros. Una vez dejamos atrás la zona de la Presa, seguimos avanzando por la pista con el río a nuestra derecha durante varios kilómetros, prácticamente llanos con excepción de algún que otro repecho. En la parte final del recorrido, cruzamos de nuevo otro puente y pasamos junto a la urbanización Masía de Traver, en el término de Riba-roja. Sin dar tiempo para más llegamos al pueblo junto a la carretera que llega hasta l'Eliana por debajo de un puente. Si seguimos la pista podemos llegar hasta la población de Vilamarxant pero eso será en otra ocasión.
Continuando paralelos al cauce del río nos adentramos en el pueblo por la parte Sur, allí se encuentra un bar con muy buena gente y donde en una ocasión me "salvaron la vida" ya que me había quedado sin agua en el bidón y en el mes de agosto esto puede suponer un problema, sobre todo a ciertas horas, mi agradecimiento desde aquí para ellos.
Damos por finalizada este tramo de la ruta y espero poder seguir añadiendo más detalles y nuevas rutas.
¡ Hasta la próxima !
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